Definir tu público objetivo es el primer paso para planificar tu comunicación y tus recompensas.
Para que tu campaña de crowdfunding reciba apoyo desde el principio y tenga un arranque potente, es fundamental planificar de antemano cómo buscarás patrocinadores. Reflexiona sobre quién forma parte de tu “crowd”.
A cada persona que llegues a través de la difusión del proyecto puede convertirse en una potencial aliada para tu misión.
Y ese apoyo no tiene por qué ser solo económico: también puede consistir en difundir el enlace del proyecto.
El camino hacia tu público objetivo consta de 4 pasos
Crear una lista de contactos
- Crea una tabla o un mapa mental con todos tus contactos, reflejando toda tu red personal.
Lo mejor es hacerlo siguiendo el principio de “capas”: - Círculo más cercano: familia y amistades
- Círculo conocido: miembros del equipo, compañeros de entrenamiento, escuela, universidad, trabajo, vecinas/os
- Personas que quizás no conozcas personalmente, pero que podrían interesarse por el proyecto: miembros del club, deportistas de la misma disciplina, empresas de la región
Consejo: cada integrante del equipo puede crear su propia lista y luego unificarlas.
Clasificar los contactos
Ahora toca clasificar a cada persona en una de estas tres categorías:
- Patrocinadores/as: personas que pueden apoyar económicamente con el importe que deseen.
- Multiplicadores/as: personas con gran alcance en tu entorno relevante, que pueden actuar como influencers o embajadores del proyecto.
- Colaboradores/as de recompensas: personas que pueden ofrecerte productos o servicios como recompensas. Ejemplos: vales de café, ayuda con una mudanza, descuentos de empresas locales o merchandising donado por una marca.
Identificar los grupos objetivo
A continuación, revisa tu lista de contactos del paso uno y agrúpala en diferentes públicos objetivo. Así podrás adaptar mejor tu comunicación más adelante.
- Grupo objetivo 1: Personas cercanas con un vínculo emocional con el proyecto (familia, amistades, miembros del equipo o del club).
- Grupo objetivo 2: Personas con conexión geográfica al proyecto (empresas locales, ciudadanos/as de la misma ciudad).
- Grupo objetivo 3: Personas con conexión temática con tu misión (atletas de la misma disciplina, actores de otros teatros, personas de asociaciones relacionadas).
Planificar las acciones de comunicación
Dividir tu comunidad en estos tres grupos te permite preparar acciones de comunicación más eficaces y orientadas.
Esto significa que podrás adaptar tanto el canal de comunicación como el estilo del mensaje según el grupo al que te dirijas.
En resumen: Es fundamental aplicar una mezcla de canales para garantizar que tu público objetivo entre en contacto con el proyecto por distintas vías.